Secretos en el matrimonio y necesidad de privacidad

Anonim

Steve West / Taxi / Getty Images

Ser honesto con su cónyuge no necesariamente significa que debe compartir cada pensamiento, sueño, temor o fantasía con esta persona. En realidad, la honestidad puede ser un arma de doble filo en tu matrimonio. Saber qué compartir y qué no compartir es una importante habilidad de comunicación para que las parejas aprendan y usen en su matrimonio. También puede ser algo que puede ayudar o dificultar la paz y la armonía con su cónyuge.

Cómo mantener los secretos y el derecho a la privacidad

Usted tiene derecho a la privacidad en cualquier relación, incluso en el matrimonio, la familia o el grupo. En cualquier relación, tiene derecho a mantener en secreto una parte de su vida, sin importar cuán trivial o importante sea, por la única razón que desea hacerlo. También tiene derecho a pasar un tiempo a solas y solo con usted mismo.

Es saludable y sabio respetar la sensación de privacidad emocional y física necesaria para usted y su cónyuge. De lo contrario, irónicamente, terminas limitando tu intimidad el uno con el otro, no mejorando. No puedes ser realmente íntimo con tu pareja sin estar en contacto con las partes más íntimas de ti también.

¿La honestidad es siempre la mejor política?

Existen razones válidas para mantener un secreto de su cónyuge. No deberías tener que defender no revelar momentos embarazosos o hirientes de tu pasado. Es posible que el secreto implique a alguien más que pidió que no se contara la historia.

Hay muchas parejas que han estado casadas durante mucho tiempo y tienen secretos personales que no han compartido con sus cónyuges. El sentido del espacio y el sentido de una parte privada de uno mismo es importante para muchas personas.

Saber cuándo compartir un secreto

Si tiene un secreto que cree que debería compartir, pero no está seguro de hacerlo, mire sus propias respuestas físicas cuando esté ocultando el secreto.

Si su presión sanguínea aumenta, o si pestañea mucho más rápido, o si su respiración es más pesada, o si está sudando más, entonces estas podrían ser indicios de que debe compartir ese secreto en particular.

Si mantienes un secreto porque no quieres enfrentar una responsabilidad en tu matrimonio, esto puede crear problemas. Retener hechos o información que su cónyuge necesita saber en la toma de decisiones es manipulación dañina.

Los secretos que pueden dañar tu matrimonio son los siguientes:

  • problemas de trabajo
  • no pagar las cuentas
  • prestar dinero
  • no revelar una enfermedad
  • ver a familiares y amigos
  • mintiendo sobre cómo gastas dinero
  • manteniendo ocultos los hábitos de adicción o abuso de sustancias
  • problemas legales
  • teniendo una aventura

Cuándo mantenerte callado Acerca de un secreto

Si vas a compartir un problema secreto o difícil con su cónyuge, tenga en cuenta que los siguientes momentos no son un buen momento para revelar esto:

  • Al acostarse.
  • Si alguno de ustedes está borracho.
  • Cuando cualquiera de ustedes está en una situación estresante.
  • Durante los períodos de mal humor.
  • Cuando usted o su cónyuge están enojados.
  • Cuando alguno de ustedes está cansado o enfermo.
  • Cuando su cónyuge ya está lidiando con malas noticias.

Buscando ayuda

La honestidad y la confianza son vitales para el éxito de un matrimonio. Es una delgada línea entre qué secretos son aceptables y cuáles perseguirán a un individuo y dañarán un matrimonio.

Si comienza a sentir la distancia en su matrimonio y cree que puede ser el resultado de un secreto, entonces es hora de consultar a un consejero profesional.

Un compañero que descubre que le han mentido directamente, que ha recibido una verdad a medias o que no ha recibido información crítica, puede sentir una enorme sensación de traición. Estas traiciones pueden ser difíciles de regresar y es posible que su pareja nunca vuelva a sentir una sensación de confianza.

¡Si crees que esta situación se aplica a ti, cuanto antes te enfrentes mejor!

* Artículo actualizado por Marni Feuerman